Un
artículo publicado recientemente por la Academia Americana de Neurología insta
a no recetar "medicamentos para estudiar" con la finalidad de mejorar
la memoria y las habilidades de pensamiento en niños y adolescentes sanos. La
nociva práctica ha sido denominada “doping cerebral” o “meducación”
(contracción de medicar y educación) y consiste en administrar medicamentos de
los que normalmente se usan para niños con trastorno por déficit de atención
con hiperactividad (TDAH) a los estudiantes exclusivamente para aumentar su
rendimiento docente de cara a un examen importante, como los equivalentes a la
Prueba de Selectividad en España (SAT en EEUU, para el acceso a la
universidad).
Según
los autores del estudio, el problema es similar al provocado por los fármacos
para aumentar el rendimiento deportivo, unos “mejoran músculos” y los otros
“mejoran cerebros”.
El
alarmante crecimiento del número de niños y adolescentes medicados para el
TDAH, así como el aumento de la cantidad de recetas de estimulantes y fármacos
psicotrópicos en EEUU (10 veces mayor que hace 20 años), hizo recaer la
atención sobre este asunto.
El
uso de este tipo de farmacoterapia en chicos sanos es inaceptable desde el
punto de vista sanitario y también ético. Se corre el riesgo de medicar
excesivamente (con los consiguientes efectos tóxicos), además de que son
fármacos que crean dependencia química. En mi experiencia (primero como
estudiante y después como profesora de la Universidad), más de una vez he
sabido de jóvenes que terminaron en el Centro Nacional de Toxicología por
acción del metilfenidato (fármaco aprobado para el TDAH, y usado indebidamente
para estudiar). El problema también se hace omnipresente en las aulas
españolas, no me atrevería a decir que por prescripción facultativa (porque no
me consta), pero es cada vez más una realidad; de hecho, la conversación con
una de mis estudiantes (de Universidad) hace un par de días me recordó que tenía pendiente
escribir sobre el tema.
En
lo que atañe al aspecto ético, los autores del informe refieren que "el
equilibrio se inclina contra el abuso y hacia la precaución, ya que los niños
aún están creciendo y desarrollándose” y hay muchas cosas que no se saben. ¿En
qué medida puede ser ético que se obligue o permita consumir a los niños y
adolescentes sanos medicamentos que no necesitan? ¿No será que tratamos de
suplir con medidas poco seguras lo que de seguro como padres, educadores,
sociedad,... nos toca hacer?
Una
vez más me reafirmo en mi creencia de que los medicamentos están para ser
utilizados cuando son estrictamente necesarios y eso debería determinarlo
(sobre todo en casos tan sensibles) un especialista.
Hay
mucho que se puede hacer para mejorar la disposición y el rendimiento a la hora
de estudiar, pero pasa por una mayor conciencia como sociedad de la importancia
de un estilo de vida sano y cómo lograrlo. He dejado algunos consejos que nos
aporta la Naturopatía para ayudarnos a estudiar (Aportes
naturales para ayudarte a estudiar.); de todos modos, el mayor aporte,
desde mi punto de vista nunca será químico, ni siquiera empleando productos
naturales. Mientras el nivel de madurez de nuestros países no premie
verdaderamente la cultura del esfuerzo, y la educación de las nuevas
generaciones esté a la altura de lo que los nuevos tiempos demandan,
atiborraremos a nuestros niños y jóvenes de medicamentos que no necesitan, que
NO les dejarán ver lo que SÍ verdaderamente necesitan.
FUENTE:
Neurology, online, March
13, 2013. William D. Graf, Yale School of Medicine; Mark Wolraich, University of
Oklahoma Health Sciences Center.
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Aviso Importante: Toda la información mostrada procede de diferentes fuentes científicas y de la experiencia acumulada en el ejercicio de nuestra profesión, y tiene la finalidad de orientar en lo que puede hacer el estilo de vida y el uso de ciertas terapias naturales por tu salud. En ningún caso pretende reemplazar el consejo o la prescripción de un profesional de la salud. Es tu responsabilidad asesorarte y respetar el criterio de tu médico de cabecera y/o especialista en lo que se refiere al seguimiento de un tratamiento en particular o la adopción de una terapia natural complementaria o alternativa.
Maravilloso articulo
ResponderEliminarMuchas gracias. Nos alegramos de que le haya gustado. Cualquier sugerenciade tema o comentario, siempre será bien recibido. Un saludo afectuoso.
EliminarSoy mamá de una niña de 10 años con TDAH y TND. En la seguridad social me han "recomendado" que medique a mi hija, cuando yo me he negado ellos me han amenazado diciéndome que no quiero el bien para mi hija y ahora me han dicho que si no la voy a medicar no me volverán a dar cita para unas pautas y un seguimiento psicológico. Y tampoco un apoyo ni seguimiento de Laura en el colegio.
ResponderEliminarEsto es una auténtica vergüenza que "obliguen" con amenazas disfrazadas a medicar a tus hijos.
Mi hija Laura es una niña buena educada y estudiosa (dentro de sus limitaciones), pero lo que más me enorgullece es que gracias amis 10 años como madre junto a ella y con mi "terapia particular familiar" mi hija tiene una vida social completa. No me importa que, aunque mi hija tiene 128 de coeficiente intelectual, no saque las notas que podría sacar sin el TDAH. La vida no es solo estudiar y seguir una normas establecidas, cada persona tiene sus propias motivaciones, sus limitación, su personalidad y sus cambios de humor y no por ellos debemos estar mediacandonos... pues eso es un comportamiento normal y natural del ser humano.
La diversidad no es una enfermedad que haya que ser tratada es una cualidad de nuestra especie.
Muchas gracias por tu articulo al fin una profesional que entiende y apoya la no medicación a estos niños.
Eres una madre coraje, no sólo por sacar a Laura adelante cada día, sino por hacerlo pese a viento y marea. No hay derecho a que le nieguen un apoyo psicológico y escolar, cuando se supone que lo necesitará más aún. Es una contradicción.
EliminarMuy bonito lo que dices de tu hija, es mucho más de lo que algunos padres pueden decir a poco que sean objetivos. “Buena, educada y estudiosa, además de una vida social completa”.... ¿Hay alguna pastilla que nos convierta en esto? Son adjetivos que deberían tener que ver con la educación y no con la medicación.
Ahora, sólo un buen especialista podría decirte si en realidad debe ser medicada para algo en concreto, pero no creo que pase porque rinda más en los estudios. Como tú dices, está sobrevalorado y me quedo con tu frase "la diversidad no es una enfermedad (...)".
Un saludo a ambas.