viernes, 25 de enero de 2013

Productos Integrales: To Be, Or Not To Be.

No todos los productos integrales son iguales de sanos, afirma un estudio de investigadores de la Universidad de Harvard.

Muchos productos de grano integral no son tan sanos como los consumidores creen, afirma una investigación reciente, y algunos son más sanos que otros.

"Hay mucha confusión" sobre cómo hallar los alimentos de grano integral más saludables, señaló la autora del estudio Rebecca Mozaffarian, gerente de proyecto del Centro de Investigación sobre la Prevención de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Harvard.
El equipo de Mozaffarian observó más de 500 productos disponibles en un supermercado, que incluían panes, bagels (panecillos), cereales, galletas, barritas de granola, chips (refrigerios) y otros alimentos. Tomaron en cuenta no solo el contenido de grano integral, sino el total de calorías, las grasas trans (si las contenían), los azúcares y el sodio.


Según Alice Lichtenstein, profesora de ciencias de la nutrición de la Universidad de Tufts, en Boston, el estudio aborda un tema importante: qué califica que un alimento es una buena fuente de granos integrales. "Claramente, las guías existentes son confusas para el consumidor", reconoció Lichtenstein.

En EEUU existen diferentes formas e instituciones que acreditan la valía de un producto de grano entero: el sello de grano integral, el estándar del Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA), el estándar 10:1 de la Asociación Americana del Corazón.... Aunque el estudio se realizó en los EEUU, en un mundo globalizado es válido para Europa y otros países. Es sólo considerar cuáles son las entidades por países. Sólo cambiarán los estándares e instituciones que acreditan según el país.

Según los autores del estudio ¿cuál es el consejo? Busque productos que tengan el grano integral como primer ingrediente y sin azúcares añadidos.

Algunas reflexiones propias y prestadas:

Al comprar en el supermercado hay que recurrir a aspectos prácticos. Para el consumo de alimentos etiquetados, es un consejo útil la revisión de las etiquetas en busca no solo del contenido de grano integral, sino también de los azúcares refinados, el contenido de fibras, las grasas totales, las grasas saturadas y las grasas trans... Como coincidirá conmigo en que esto no es muy práctico, mejor aún sería no comprar estos productos elaborados e ir a las lechugas, tomates y otros frescos de toda la vida y con los cereales limitarnos a comprar los que vemos en grano entero o salvado.

Los cereales refinados se conservan mejor que los integrales porque son menos nutritivos para las plagas que compiten con nosotros por sus nutrientes, y resultan más fáciles de digerir porque se les ha desprovisto de la fibra que hace que se liberen más despacio los azúcares que contienen.  Cuanto más molida esté la harina y más blanquita y sedosa sea, más superficie queda en contacto con las enzimas digestivas y más rápido se degrada el almidón en glucosa. De esta manera se suministra con gran inmediatez glucosa al cerebro (que es su principal consumidor). Visto así, la harina blanca (refinada) es “la primera comida rápida”.

El pan que se vende como integral, en la mayoría de los casos no es de grano completo, está hecho de mezcla de harinas con un pequeño porciento de trigo integral y se le han añadido algunas vitaminas para suplir su carencia en la harina blanca.

El pan industrial integral muchas veces dista bastante del alimento tradicional que todo el mundo conoce como “pan” y que según nuestras abuelas se hace con muy pocos ingredientes (harina, levadura, agua y un pellizco de sal).

¿Un ejemplo? El “pan” llamado pan blanco de grano entero tierno y suave de Sara Lee (comercializado en EEUU). 1ª. Contradicción: ¿pan blanco integral? Si fuera integral no podría ser blanco porque el grano entero aporta unos compuestos que no dejan que sea blanco, esta contradicción la resuelve a base de usar determinadas variantes de trigo albino y aditivos. 2ª. Contradicción: contiene unos 36 ingredientes ¡demasiados para un pan!. 3ª. Contradicción: Tiene ingredientes verdaderamente impronunciables y desconocidos para el común de los humanos. Hagamos una prueba: intente decir en voz alta “azodicarbonamida” y “diglicéridos etoxilados”. Ya después me cuenta... Y si esto no fuera suficiente, contiene jarabe de maíz rico en fructosa (producto de la refinación del maíz, enriquecido además con fructosa, comúnmente encontrada en la fruta pero que suplementado resulta un aluvión de azúcar simple que se metaboliza en el hígado independientemente de la insulina). 

El grano integral es mejor que provenga de la agricultura ecológica porque si no puede estar contaminado con metales pesados, pesticidas, etc...

Los cereales del desayuno (herencia de Kellog al valorizar el efecto de los carbohidratos sobre las proteínas), aunque se llamen en muchos casos integrales, están muy alejados de ser productos sanos. Por una parte, están cargados de azúcares simples en su mayoría (son azucarados). Adicionalmente, están compuestos de una serie de aditivos propios de la industria para hacerlos conservables y “comestibles”. Tampoco es que lo que predomine es que sean de grano entero, sino lo que hemos dicho para el pan, “engendros” vitaminados y con un porciento de grano integral, y como si fuera poco, constituyen en ocasiones verdaderas lijas para los intestinos. ¿Alternativa para nuestros desayunos?. Puede probar la siguiente receta:


Cereales con manzana y nueces (muesli).
 
1 manzana troceada, o alguna otra fruta de estación
leche vegetal
nueces picadas (3 ó 4)
1 taza de copos de avena
1 taza de trigo integral (grano entero inflado tostado)
1 taza de arroz (entero inflado tostado)
pasas al gusto
2 cucharaditas de semillas de lino (molidas aportan omega 3, si no las mueles serán excelentes como laxante pero no utilizará su omega 3).


La noche anterior lavar la avena y dejarla hidratar en agua bien tapada. También pueden ponerse a hidratar las semillas de lino. Al día siguiente se escurren la avena y el lino y se mezclan con el resto de los ingredientes. 
Y, ¡qué aproveche!


Fuente: Medline Plus Noticias. 

Artículos relacionados:  

 Fibra dietética: 7 razones para consumirla.

Aviso Importante: Toda la información mostrada procede de diferentes fuentes científicas y de la experiencia acumulada en el ejercicio de nuestra profesión, y tiene la finalidad de orientar en lo que puede hacer el estilo de vida y el uso de ciertas terapias naturales por tu salud. En ningún caso pretende reemplazar el consejo o la prescripción de un profesional de la salud. Es tu responsabilidad asesorarte y respetar el criterio de tu médico de cabecera y/o especialista en lo que se refiere al seguimiento de un tratamiento en particular o la adopción de una terapia natural complementaria o alternativa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario